Quienes piensan que el fracaso comercial de un periódico es responsabilidad de los contribuyentes, se equiparan a esa manga de banqueros que piden a gritos el rescate de sus entidades con dinero público. Paradójicamente, los albaceas del Bien Supremo Obligatorio, los heraldos de lo Necesario y Obligatorio suelen estar en contra de socializar las pérdidas de los bancos, siempre y cuando sí se socialicen las pérdidas de los megáfonos de sus crueles e infames ideologías. Y es que en una competición de hipocresía, los defensores del bolsillo ajeno son insuperables. ¡Por supuesto! Si tuvieran dinero propio que invertir en sus proyectos de ingeniería social, no tendrían tiempo para salvarnos a todos de nosotros mismos.
Esto viene a cuento del cierre de Galicia Hoxe, periódico prácticamente desconocido incluso entre quienes tienen un kiosko de prensa en la plaza de María Pita. El típico medio que sirve para citar su contenido en reuniones de "frikis por la independencia del asiento trasero de mi seat panda". En palabras de uno de esos lobbys en defensa del mito y la emoción y citando al propio diario:
"É moi grave para a lingua galega o peche de este medio e para a liberdade de expresión", apostilou Carlos Callón, quen engadiu que "non son importantes correas de transmisión do goberno, polo que deixan de ter axudas da Xunta".
Por todo, iso, A Mesa avanzou que estudará as datas de mobilizacións a celebrar en próximos días contra a desaparición do galego dos xornais e denunciar que "o galego pasa a non ter presenza nos quioscos". Con estas protestas pretenden, segundo dixo, chamar a atención dos cidadáns, sobre "como o Goberno está a matar a lingua" galega...
Traducción: que nuestras abuelas ya no nos compren la mierda que escribimos significa que hay una conspiración de la Xunta.
Supongo que el propio contenido del diario no tiene nada que ver con que no sea leído en una región conocida por su conservadurismo. Para muestra, un pedazo de entrevista:
O socialismo real é a solución para unha sociedade inxusta, embrutecida e desigual?Esto último lo traduzco un poco: "Al vivir en sociedad, la libertad está limitada por el respeto, si hay respeto de verdad, las libertades individuales estarán garantizadas". ¡Toma! La pájara ésta se acaba de cargar doscientos años de constitucionalismo de un plumazo.
Como se podería definir o "socialismo real"...?. O neoliberalismo ultracapitalista é unha ideoloxía brutalmente inxusta baseada na desigualdade, mais non é o único elemento (aínda que sexa o dominante) na sociedade en que vivimos. A resistencia e, quizais máis interesante, a disidencia, tamén están aquí. Hai formas de colectividade baseadas no respecto que operan na nosa contorna dende a cooperación, o apoio mutuo (a solidariedade real), e o intercambio; non me refiro a idílicas comunas hippies afastadas do mundanal ruído, senón a agrupacións (formais ou non) que crean cooperativas de cultivo ecolóxico, que impiden desafiuzamentos, que okupan espazos privados para uso público, redes de mulleres con diversos obxectivos (tamén redes de homes, como os diversos colectivos de homes pola igualdade), mesmo formas de "familia" -outros tipos de afiliación- que cuestionan radicalmente o núcleo do capitalismo e o seu individualismo alienante. Comunitarismo real, preferiría eu.
Cal é o medo e o prezo da nosa propia liberdade, Belén?
A liberdade a secas é un signo demasiado ambiguo: a liberdade para que ou de que? O fascismo "libera" o pobo do xugo comunista, o machismo "libera" as mulleres das cargas do traballo (remunerado) e dos perigos dos espazos públicos (de novo, en referencia á Lei de familia do PP galego que nos quere de volta na casa). Ao vivir en sociedade, a liberdade está limitada polo respecto, e se hai respecto verdadeiro, as liberdades individuais estarán garantidas.
Y todavía se preguntan por qué la gente no les lee...
Resulta muy revelador que precisamente los medios de comunicación monolingües en gallego sean los que estén cerrando desde el inicio de la crisis económica: A Nosa Terra, Galica Hoxe, Vieiros... Eso por una parte. Por la otra, no existe un medio monolingüe en gallego que no sienta -como mínimo-, cierta simpatía por el nacionalismo, el comunismo y el odio a muerte a Núñez Feijoo. ¿Eso no se lo tienen que hacer ver? ¿Es realmente imprescindible definirse como nacionalista al escribir en gallego? ¿Es culpa de "la sociedad" que los autores en gallego sobrevivan a base de subvenciones? Más allá del idioma, en mi opinión, está el contenido. Ése es el elefante en la sala de la prensa escrita en gallego.
No le eches la culpa al idioma, a la Xunta o a "la sociedad". Lo que escribes no interesa y punto. El conocimiento del gallego es superior al 90% en la población gallega. No pongas excusas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario