Veamos sus razones:
- Gobierno (PP): «no tiene cabida en la Constitución». De Guindos no opina lo mismo, pero ahora, con su visión de estado, cambia de opinión.
- Sindicatos: «es el despido sin causa y gratis total» va a «precarizar la contratación».
- Patronal: «los contratos temporales son necesarios».
- PSOE: «la temporalidad ya está baja porque depende de la construcción».
- IU: «el problema es que el sector público no tiene incentivos» y «es una pócima mágica» que no va a solucionar nada.
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Consejo Económico y Social español |
Es muy fácil responder a cada una de las patas de esa mesa que nos aplasta y no nos deja respirar. Todas las razones esgrimidas, o son nubes de colores o son reflejo precisamente del problema. No es momento de responder a estos portavoces pues, como he dicho, dijeron lo primero que se les ocurrió. Lo ideal sería esperar a ver algo más desarrolladas sus posiciones. Pero eso no lo veremos. ¿Por qué? Porque en este país no existe el debate.
Al menos hay algo que sí debemos agradecer a estos defensores del statu quo: se han retratado. Una vez más. Quieren seguir con un juego que destroza a este país, que lo hace diferente del resto de países del mundo, cuando por contexto, capacidad, recursos y oportunidad, España podría ser un país más o menos normal, más cercano a las medias estadísticas de la UE. Pero, tenemos a la gente que toma las decisiones muy preocupada para que sigamos en el furgón de cola. ¿Qué nombre recibe eso?
Es difícil que sin barreras arancelarias con nuestros principales socios comerciales, con un clima templado todo el año, con una población formada y con uno de los idiomas más hablados del mundo tengamos regiones enteras con un 40% de paro. Es muy difícil conseguirlo. Hay que aplicarse a ello. A mi sólo se me ocurren dos formas de llegar a tan gloriosa meta: o bien te bombardean durante meses o bien tienes a los mismos monstruos en puestos de responsabilidad durante décadas. Vampirizando.
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Por esto no podemos tener cosas buenas. |
El gobierno está contento con la reforma laboral y puede que en cuestión de meses sí comience a dar resultados (cuando otros arreglen sus problemas y nos compren productos no elaborados, como angoleños que somos). Yo me pregunto qué resultados son los admisibles para el gobierno. Estamos tan acostumbrados a los resultados mediocres, que lo que para el resto del mundo es un horrible fracaso, para nuestras cabezas pensantes y vampíricas es un notable éxito y la gente, poco preocupada por participar en el debate público, comulgará con lo que le den.
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El buzón de sugerencias y la papelera son la misma cosa. |
Un paisaje profundamente desmotivador pero no por eso hay que dejar de intentar que las cosas cambien.
Bola extra: UPyD es el único partido del congreso que se posiciona frente a los vampiros. Punto para ellos.
Cuñados y excepciones (o historia rápida del mercado laboral español):
2 comentarios:
Los bandidos politicos de todos los colores empiezan a hablar de los "pactos" sin presentar ninguna idea para pactar: ¿no será porque presienten que pronto veremos la luz al final del tunel y todos quieren apuntarse al "exito"?!
Partidos de la oposición sí presentan ideas. Pero proponer un pacto a un gobierno de mayoría absoluta con mandato de Bruselas sólo se hace por marketing. Y porque no levantan las encuestas.
No hay luz al final del túnel: no estamos en un túnel, estamos en un pozo.
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