viernes, 29 de junio de 2012

Crisis pagafantas

Los economistas tienen poco que decir en esta crisis pagafantas. No digo que no deban hablar ni que muchas propuestas que pasan totalmente ignoradas no sean interesantes (y probablemente menos dolorosas para el que al final va a pagar toda la fiesta). Quien más influye en los morlocks que toman decisiones, son los contables. Un economista puede ser contable, pero un contable no es necesariamente economista, ni ingeniero, ni nada; sólo cuenta.

La falta de imaginación de Moncloa para obtener recursos, sospecho que se debe a que ahí han enchufado a contables (con sus voces de pito, sus viseras y sus cajas registradoras antiguas). Se encuentran con que tienen que reducir la diferencia entre ingresos y gastos (un típico problema contable, como el chorro de tinta en la camisa) y deciden recortar donde menos afecte al poder (eliminando exenciones a quienes producen, manteniendo todo el aparato de los amiguetes,... ) y subir ingresos destruyéndolo todo a su paso, vía impuestos, tasas, etc. Y así es cómo una crisis financiera se transformó en una crisis de deuda soberana y, finalmente, acaba siendo una crisis pagafantas. Lo que quiere decir que tú, pepito, acabarás pagando mientras otros mantendrán en gran medida no sólo su capacidad económica, sino también su capacidad de influenciar o participar en la toma de decisiones que, entre otras cosas, hacen que tú acabes pagando. ¿No es genial? Es más, por si esto fuera poco, viendo la cantidad de deuda que hay que pagar y lo costoso que es pagarla (no en términos de interés, que también, sino en términos de cantidad total de riqueza producida y cantidad total de elementos generadores de riqueza); pepitos serán también los hijos de los pepitos, y los hijos de los hijos de los pepitos, y los hijos de los hijos de los hijos... ya sabéis cómo sigue.

Capitalización pública directa a la banca

Si conocéis a alguien a quien le gusten las motos, preguntadle sobre la historia de los patrocinadores de Sete Gibernau. Me parece una historia muy gráfica sobre el tipo de país que tenemos que aguantar.
Es normal que, entre tertulianos que repasan los argumentarios de partido, economistas con ideas originales pero inaplicables en este universo físico, toda la legión de periodistas cortesanos que nos dicen a cada momento lo que desayuna la Merkel por mucho que eso no sea lo que nos interese, y ministros que en lugar de ministros parecen los RRPP de un banco cualquiera; no nos estemos enterando de nada.

Son tantas las ansias de dar alguna buena noticia, que, si no las hay, se inventan. Como la inyección directa de eurodinero a la banca. Sí, está "bien" que esa pasta no pase por una agencia intermedia del gobierno (no suma al total de deuda pública, ni nos pueden reclamar tomar medidas). Pero detrás de esto queda un maravilloso desierto en el que nada cambia:
  • la estúpida forma de ver la economía nacional como un juego contable.
  • la contabilidad basada en aumentar ingresos jugando con diferentes tipos de impuestos (reconozco que el juego aquí es de funambulista: te interesa elevar el ahorro, luego postergas el gravar al consumo, pero están subiendo todos los precios -luz, tasas- y no puedes al mismo tiempo tener alto el impuesto de la renta. ¿He dicho «no puedes»? El Gobierno ha decidido tener al mismo tiempo todos los impuestos, precios y tasas, altos, justo en un momento de diarrea económica. Fenómenos). 
  • España no es un país con graves diferencias entre ricos y pobres. Sin embargo, entre empresas ricas y pobres sí existen enormes diferencias. ¿En serio que no hay ideas en este ámbito para favorecer la creación y crecimiento de pequeñas empresas? ¿En serio que esto no se ve como la medida que no descontenta a nadie -políticamente gratuita- y que además, a medio plazo es garantía -porque la gente no es idiota- de creación de nuevos puestos de trabajo?
  • grupos gremiales intentan aferrarse a un pasado que jamás volverá. El carbón español no es competitivo y las subvenciones a su producción lo han acabado por rematar. Contentémonos con saber dónde está ese carbón y tengamos una reserva estratégica para cuando las cosas estén aún peor. Y por cierto, ¿ningún minero que se queda en la calle sabe nada sobre nuevas minas de oro que se están abriendo/aumentando su producción en España? ¿Su experiencia no es útil? ¿Están los sindicatos haciendo de sindicatos o de otra cosa? Cuando hablo de grupo gremial, incluyo aquí a los políticos profesionales: como Vidal-Quadras, creo la carcasa se debe reducir en la misma medida que las necesidades de mantenerla. Esto no es una locura caudillista, sino una certeza matemática.
  • la semana pasada se vendían en la costa de la Mariña lucense, apartamentos por menos de 20.000 euros. En muchas villas del interior no es difícil encontrar pisos nuevos por unos 500 €/m². Existe un cambio de mentalidad que todavía está por hacerse. Los pepitos ya no podemos aspirar a seguir mejorando lo precedente: hemos dado un gran salto hacia atrás y a partir de ahí es desde donde seguiremos adelante (si los compromisos que en nuestro nombre adquieren nuestros próceres nos dejan, claro). Se acabó el piso a estrenar en el centro, se acabaron las urbanizaciones a diez minutos del centro. Todo eso se acabó.

En fin, la materia prima última donde se crea la nueva riqueza, tiene que operar en unas coordenadas donde no se lo ponen nada fácil. Que los cantos de sirena, los brindis al sol y todas estas cositas que surgen de vez en cuando de forma desesperada, no nos hagan perder el norte: queda mucho camino por delante y se acerca el invierno.

lunes, 25 de junio de 2012

Sobre el video machista de la UE

Si yo fuera uno de los estómagos agradecidos ingenieros sociales de la Unión Europea, estaría preocupado. Me preocuparía plantearme el nivel de inutilidad supina, conspicua y constante que demuestran los expertos en publicidad contratados (quienes actúan como cimientos de la actual construcción unioneuropeísta). Claro que, como el producto sale averiado de fábrica, al menos no estaría sorprendido ante los inmensos mojones que les contrataría con el dinero de otros.


La historia viene a cuento del vídeo de propaganda de la UE en el que "se promociona la ciencia entre las chicas". El Club de Erizas Viudas de Guerra, las Hermandad Habitual de Pelonas y la Legión Oscura del Feminazismo han puesto el grito en el cielo (sólo saben hacer eso) para denunciar la imagen frívola de las mujeres que proyecta el vídeo de marras. A ver, el gusto del vídeo es discutible (a mi me parece un anuncio de gafas), lo que no veo denigrante es ese tratamiento de la mujer. Ya estamos acostumbrados a que sólo aparezcan modelos estandarizadas en todo tipo de publicidad. Con una publicidad hiperregulada, y viviendo como vivimos en el reino de lo políticamente correcto, llama la atención que sea la propia UE (de la que manan todas estas regulaciones absurdas), la que caiga en la trampa. Tantos años de buenrollismo abraza-árboles han acabado por crear un monstruo en forma de tejido de asociaciones protestonas por todo y jugosamente financiadas. Reconozco cierta justicia poética en que sea ahora la UE el blanco de las desenfrenadas iras de estos grupos de extremistas intolerantes.

Sophie Germain,
matemática francesa
Como digo, no es la forma que tiene el vídeo de pintar a la mujer lo que me molesta: al fin y al cabo, es deseable que una mujer aparente estar sana y los cánones de belleza actuales están muy extendidos. Todos colaboramos en potenciar esta imagen de mujer canónica: eternamente joven, sin irregularidades en la piel, etc. Desde los canales progres que ponen a cupletistas a presentar el Telediario hasta las revistas "para mujeres", en todas partes se ve ese modelo de mujer (insisto en que en los medios "para mujeres" se incide todavía más en esto. Comprobadlo comprando cualquier revista clitoridiana y en el primer anuncio de cremas de eterna juventud, no veréis a una señora mayor, negra, gorda y llena de granos. Convengamos, pues, en que son las propias mujeres -porque estos medios y esa publicidad están hechos por mujeres en gran medida- las primeras interesadas en machacar esa imagen). No es eso lo que me molesta.

Ni siquiera me molesta que la Asociación de Mujeres Que Quieren Ligar con Otras Mujeres Pero les Da Vergüenza Reconocerlo (la AMQQLOMPDVR) ponga el grito en el cielo. Personalmente defiendo el asociacionismo (ojo, el asociacionismo que no vive de subvenciones públicas, es decir, el asociacionismo que no es correa de transmisión del poder establecido) y, que la gente proteste contra algo, es una forma más de expresión democrática que tolero.

Lo que realmente me molesta del video de marras es la idea de "hacer un video para que a las mujeres les interese la ciencia", me parece una idea tan asquerosa que no sé ni por dónde empezar a rajar de ella. Destriparé unas ideas rápidas por puntos:
  • "Vídeo para mujeres". Esto es discriminatorio. Yo jamás entendí por qué se supone que la discriminación positiva es buena. ¿Harán vídeos dedicados a negros? (Insisto con el tema de los negros por un comentario que surgió en la Eurocopa 2012: casi todas las selecciones tienen jugadores negros, pero ninguno de esos países tiene ministros negros, ¿qué clase de Europa están fabricando?).
  • "Hacer un vídeo para que la ciencia sea atractiva". Esto es lo peor de todo. Esta súper-tonta idea refleja que el encargado de hacer el vídeo, el encargado de darle el visto bueno y todos los colaboradores necesarios en esa cadena de despropósitos desde el origen de la idea (en los baños de una sauna gay de Bruselas, supongo) hasta el día de la presentación, no tienen ni pajolera idea de lo que es la Ciencia. Ésta debe ser la misma gente que piensa que Punset es científico o Torreiglesias médico. O que la homeopatía y el tarot son disciplinas rigurosas. Ni en un millón de años crearás una nueva vocación científica con un anuncio mierder de gafas o zapatos (o lo que sea que haya sido esa bazofia de subproducto poco elaborado de unioneuropeísmo). En la campaña "La ciencia es cosa de chicas", parece que hay otros vídeos bastante mejor hechos: entrevistas a científicas, etc. Acepto que puedan ser un poquito informativos (no los vi), lo que es absolutamente inaceptable para cualquier ser humano, es esperar que con un puñetero videoclip vas a crear ninguna puñetera vocación (ya puestos, que no inventen y usen la Sinfonía de la Ciencia).
Entonces, ¿cuál es la solución que propongo para incentivar las vocaciones científicas entre las mujeres? Ninguna. No propongo ninguna porque creo que de eso se encargan los maestros cuando todavía están a tiempo, es decir, cuando cogen a los chavales con entre siete y trece años. Y por supuesto, jamás aceptaría una campaña dedicada exclusivamente a las mujeres: me parece igual de absurdo que prescindir de ellas en las fuerzas armadas.

viernes, 22 de junio de 2012

ETA gana otra batalla

Pensar el Mal es uno de los ejercicios más complicados que hay. En primer lugar porque vivimos en una época donde la separación entre Mal y Bien no está clara. Se difuminan las barreras en aras de frasecitas de libro de autoayuda: "son sus costumbres y hay que respetarlas", "no se pueden ilegalizar ideas" (os juro que esta última frase no me la he inventado, la dijo el otro día un diputado que debe tener un melón en el lugar del cerebro).


La homogeneización democrática, una parte más del terrible fundamentalismo democrático, cubre todo con una película de ponzoña: se trata de igualarlo todo por abajo. Incluso la ética. Una ética bajuna, una ética para salir del paso, una ética de balones fuera ("ya estaba así cuando llegué", "la sociedad es la culpable"). Si hubiera un campeonato mundial de alimañas, España quedaría en segundo lugar, pues a la ética bajuna se le une la tan manida envidia. Ese cainismo o revanchismo que nos impide ser la primera potencia mundial en algo más que fútbol (la altísima competitividad en el fútbol hace que seamos los mejores. Nadie se plantea esa misma competitividad en el mundo de la robótica o en la ingeniería genética. Curioso).

Como decía, en el mar del fundamentalismo del respeto a todo (y digo bien, respeto, pues la tolerancia está a punto de ser ilegal: hay que respetar todo, pero ya no se puede tolerar nada), tardaban en llegar esos efluvios ponzoñosos, esos humores suicidas a un Tribunal Constitucional que, como cualquier otra institución del Estado, vive porosamente de los vapores que destila la masa informe del omnirrespeto. Un Tribunal Constitucional que se supone compuesto por doce heterótrofos, pero en el que solo están presentes once. Un TC en el que de esos once, tres están en situación de interinidad. Un TC cuyos miembros salen tarados de fábrica: elegidos por políticos a su vez elegidos por otros políticos, que en una especie de sondeo general reciben un cierto apoyo de una parte minúscula de los ciudadanos.


No cabía esperar otra cosa de esta institución tarada. Que ETA gane al Estado de Derecho no es algo que suceda de la noche al día. Estamos viendo un proceso de rendición paso a paso en el que por un lado los terroristas no hacen nada y por el otro el Reino de España otorga concesiones. Infinitas cantidades de políticos pasean por el medio de este proceso, deteniéndose de vez en cuando para bajarse los pantalones, agacharse y cagar sobre las tumbas de las víctimas mortales de los terroristas.

Luego pedirán adhesiones, seguirán declaraciones conjuntas y habrá lagrimitas de cocodrilo (ya se empieza a ver todo esto en los medios fundamentalistas). Después, se señalará con el dedo a quienes siempre han mantenido una misma posición: ni se negocia con terroristas, ni se cede ante el terror. Para a continuación, etiquetar y meter en una cajita a toda esta gente como poseedora de un "paquete completo de ideas" (esto me hace gracia, ya que en alguna manifestación estaba al lado de gente con ideas frontalmente opuestas a as mías). Una vez hecho esto, viene la deshumanización y la expulsión de la vida pública. Casi nos harán un favor: ¿quién quiere vivir en la misma sociedad que gente que prefiere ser sierva? Para ellos la perra gorda: elevad piedras a los altares, construid vuestros ídolos y regocijaos en vuestra egolatría. Tan solo estaréis plantando la semilla de vuestra autofagia. La serpiente de ETA convertida en ouroboros.

Claro que aunque las cartas ya estén marcadas, la partida todavía no ha terminado. En nuestra mano está el que su juego no les salga gratis. Para ello, con la convicción del que no tiene nada que perder -pues la partida ya la tienen ganada de antemano-, hace falta ser más pesados que nunca, poner todos los palos en las ruedas posibles, ser pegajosos, cansinos, pelmas, incordiantes, fatigosos, importunos, machacones y onerosos.


Cada vez que alguien suelte la de que hubo víctimas "en los dos lados", recuérdese que no hay dos lados. Cada vez que alguien recuerde que hay que condenar a "todo el terrorismo", se condena a todo el terrorismo, sí, para a continuación detenerse en el terrorismo-de-ETA, que, dentro del terrorismo, debe ocupar el 99% del espacio, tiempo y esfuerzo de la discusión. Cada vez que alguien diga que no se puede "ilegalizar una idea", tras la preceptiva colleja, se le explica lo que es un imposible metafísico y que digan lo que digan las palabras, lo único técnicamente condenable son las acciones. Cada vez que alguien insinúe que perseguir el terrorismo etarra es perseguir una idea distinta de España, se le responde que el terrorismo no es una cuestión política. Cada vez que alguien emplee eufemísticamente el concepto de "presos vascos", se le pide que indique si se refiere a los terroristas para dejarlo en evidencia. Cada vez que alguien pida medidas preferenciales para los presos terroristas, se le puede echar en cara su falta de compasión por el resto de presos. Cada vez que alguien critique la lucha antiterrorista en términos de persecución de las libertades, se le responde indicando cómo afecta a la democracia los cientos de miles de exiliados, por no mencionar a los muertos que no pueden votar. Y así con todo, incansablemente, una y otra vez.

miércoles, 20 de junio de 2012

Valor añadido y salida en falso de la crisis

Es deseable que un rescate a España tenga éxito (¿cómo medir ese éxito?), pero eso jamás sucederá si los que en última instancia responden por toda la nueva deuda -los españoles-, no se ponen a trabajar mejor que sus vecinos, más barato, más rápido y en productos de alto valor añadido. (No estaría mal empezar a producir masivamente productos de alto valor añadido, primero para nuestro mercado interno y luego para la exportación. Claro que para eso a lo mejor hay que empezar a tratar el problema del valor añadido desde muy abajo, en los servicios cotidianos: esos camareros incapaces de aportar valor a su trabajo, esa azafata de aeropuerto que no da razones para no ser sustituida por una máquina expendedora, ya me entendéis).

Destacar entre los demás
El caso es que la gente piensa que de forma mágica, las cosas cambiarán a mejor: mágicamente habrá un cambio en la mentalidad empresarial y política, los más inútiles dejarán de ser los primeros en promocionarse, los dineros dejarán de tirarse en nubes mágicas de colores, los colegios dejarán de fabricar acémilas en serie, a las "nuevas tecnologías" se les dejará de llamar "nuevas", etc. Creen que las cosas irán corrigiéndose solas. En este sentido, parece que lo que se escucha en la calle no difiere mucho del pensamiento mágico monclovita.

Nadie plantea de una forma mínimamente seria, las razones por las que la gente se va a comportar como debería comportarse. Se espera que la nueva deuda refuerce la posición de nuestros bancos con lo que podrán culminar procesos de fusión, de venta de patrimonio y de despidos masivos para recomponerse; esto se supone que los predispondrá favorablemente para abrir el puño y conceder más créditos (hay que recordar a los periodistas exagerados que los bancos en ningún momento dejaron de conceder créditos... a empresas que cumplen, claro). Bien, el papel lo aguanta todo. Ahora, ¿esas empresas, que están esperando nuevos créditos, han cambiado lo que tenían que cambiar para ganar más, más rápido y a un menor coste? ¿Están las empresas -por la administración pública ni me molesto en preguntar- dispuestas a dar servicios de valor añadido? Acostumbrados a movernos en un ambiente económico-productivo en el que un analfabeto que pide un préstamo, compra un prado y después lo vende mas caro, es un empresario; yo mucho me temo que para cuando salgamos de la crisis -tras mucho tiempo y soportando muchas bajas-, no habremos hecho los cambios de mentalidad necesarios.

En las crisis cíclicas, el paso que va antes del optimismo-sin-memoria es precisamente el olvido que surge de la culpa. Nuestro cerebro funciona orientado a la supervivencia: tendemos a olvidar lo malo y recordar lo bueno (y encima recuerdo e imaginación van de la mano, es decir, rellenamos lo que no recordamos). Mucho me temo que en cuanto surja algún indicio de recuperación (apuesto pincho de tortilla y caña a que se deberá a dinero exterior), tendremos que soportar paletos a paladas. Puede que el mercado laboral bulímico también se reproduzca en la clase empresarial, y con nuestros empresarios (rancios, lentos, estraperlistas: escoged dos de estas tres). Es el mismo proceso que se produce en el cerebro de las colgadas melancólicas: les ponen los tarros cuarenta y tres veces hasta que deciden cortar y, tras dos semanas, vuelven a ignorar que su nueva pareja les está poniendo los tarros, otra vez.

Vuelta al punto de partida.
Pues mi temor hoy a las 21:50 de la noche, una hora antes de la cena, es  precisamente ese: que esta crisis pagafantas no se diferencie mucho del cambio de humor de una adolescente cuya película preferida sea el chusco de Crepúsculo, que la intervención de la troika sea algo parecido a cuando unos padres hippies llevan a su hija al psicólogo por su "adicción a la compra" y que la futura salida a la crisis sea una salida en falso.


lunes, 18 de junio de 2012

El Gobierno puede empezar a trabajar cuando quiera

Se empieza hablando de cientos de miles de millones de euros por aquí y por allí y al final te das cuenta que es un dineral. Al final te das cuenta que ese dinero sale de algún sitio. Es más, tratándose de deuda, hay quien se pone en la picota al avalar esos préstamos y quien tiene que sacarse los ojos para ir pagándolos. Se entra en una dinámica perversa, una espiral de deuda infinita. Con el gasto social (aquí meto paro) aumentando y una productividad rancia que pide a gritos que el mundo se pare para darnos un respiro, incapaces de competir como es debido, los intereses que hay que devolver con el principal se disparan. La visión de conjunto es que esto es impagable.


Llegados a este punto hay que hacer dos cosas: una, esperar que se genere riqueza de la nada. Dos, pedir cuentas a quienes nos han metido en este pozo. El despilfarro se pagó a cuenta de una riqueza futura. Ahora estamos en ese futuro y vemos que la sangría continuará: no continuará con la construcción de proyectos faraónicos en aldeas, sino con el pago de la deuda. Y esta deuda se paga, abróchense, pidiendo más deuda. Que alguien me explique cómo se puede justificar eso. Que me explique alguien por qué no existe la posibilidad de reducir la deuda vendiendo activos. Es más, por qué no se plantean reducciones serias de gastos cuando a todas luces no podemos permitirnos esos gastos.

Ante una situación de emergencia nacional, lo primero que uno mira es tener un gobierno con poderes extraordinarios. Fue lo que hicieron los ingleses el 11 de mayo de 1940. Aquí no se trata de crear un gobierno de concentración nacional porque eso sería premiar a gente que probablemente debería estar en la cárcel. Además, es innecesario en tanto la banda que está el poder tiene mayoría absoluta, la mayoría de los gobiernos regionales y la mayoría de los ayuntamientos. Llama la atención que se crucen de brazos. «Cada viernes continuarán las reformas». Patada hacia adelante. «Remediar esto ya no depende de nosotros». Balones fuera.


Pongo un ejemplo rápido: la única fusión de ayuntamientos de la que tengo constancia es la de Oza y Cesuras, de eso hace un mes. De vez en cuando sale alguna noticia sobre esto en la que aparecen individuos tratando de ponerse de acuerdo en el color de la caca. Una aproximación conservadora a la fusión de municipios en Galicia pasaría de 316 a 53 (las comarcas ya están creadas legalmente y se trataría de hacer una ley que desarrollase sus competencias y construcción política partiendo de la Ley de Bases de Régimen Local). Un proceso similar reduciría drásticamente el número de municipios en toda España. Es más, en los planes que el Gobierno ha remitido a Bruselas se contempla la racionalización de administraciones. Pues no hay noticias. Y esto es alarmante porque para culminar un proceso así se necesitarían varios meses y una nueva convocatoria electoral. Pero nada. ¿Por qué destaco este tema? Pues porque todo lo que no funciona a nivel autonómico se multiplica a nivel local: infinitas administraciones encargadas de las políticas de gasto y esperando cada ejercicio un camión con dinero. Cuando cada administración se haga responsable de sus ingresos, los políticos no tendrán más remedio que cuadrar las cuentas. Hacer la tortilla más grande del mundo les costará un dinero que no tienen y es ya imprescindible e impostergable que acabe la sangría.


Lo de los bancos. ¿Cómo es posible que se hable de liquidar bancos que están nacionalizados? La liquidación tuvo que hacerse previamente. Ahora es el gobierno el responsable de esos bancos y en su mano está sacar la cartera inmobiliaria un 60-80% por debajo del valor contable. Eso lo puede hacer el gobierno esta tarde. No lo hace. ¿Por qué no lo hace? ¡Amigo!

¿Es razonable que el gobierno -el gobierno con más poder de los últimos veinte años- espere que sigan concediéndonos créditos carísimos gente que no tiene ninguna razón para prestarnos? Lógicamente existe una responsabilidad de otros países hacia nosotros y por eso es deseable que se llegue a acuerdos, pero ¿por qué sólo se magnifica esto y no se barre la casa? Tanto los indígenas españoles cabreados, como los herejes que cuentan sus monedas de oro, estamos todos pendientes de que este gobierno haga algo. ¿Acaso está esperando que la producción de paellas estivales de un respiro? ¿Creen que en septiembre no habrá reválida? ¿Hasta cuándo se puede tensar la cuerda? La gente que lo ha perdido todo ya no tiene nada que perder y la tapa de la olla está a punto de estallar.


Y hablo del gobierno por ser el que en última instancia puede ponerse al timón. Porque aquí hay un montón de especímenes que siguen soltando sus peroratas pero que ya no le importa a nadie lo que puedan decir (los Artur Mas, los Rubalcaba, los Toxo, los Rato, los KPMG...), que el foco apunte al gobierno no significa que no haya que sentar a mucha gente a soportar infinitas sesiones de preguntas. Interminables vistas en las que salga a relucir toda la ponzoña. Esto también es imprescindible sacarlo a la luz, necesitamos un poco de esa medicina para purgarnos y dentro de cincuenta años poder desincentivar conductas perniciosas.

sábado, 16 de junio de 2012

La pesadilla demográfica gallega 2

Se puede pensar que el retraso de la edad a la que tener el primer hijo y una baja tasa de fertilidad, llevarían a que más mujeres se incorporaran al mercado de trabajo. Pero no. Una vez más las ideas preconcebidas fallan: el hecho de que la mayoría de las mujeres de antes no estuvieran en el mercado de trabajo y tuvieran muchos hijos pronto, es lo que nos hace caer en una paradoja post hoc, ergo propter hoc.

Se supone que tener menos hijos (y tenerlos tarde) está relacionado con una mayor incorporación de la mujer al trabajo. Si comparamos la situación de 1950 con la actual, vemos que en los cincuenta la tasa de actividad entre mujeres jóvenes es mínima, mientras que la tasa de fertilidad se mantenía en unos sanos niveles tercermundistas. Hoy, la tasa de actividad entre mujeres jóvenes ha subido, sí, y la tasa de fertilidad ha caído en picado, por debajo del umbral de reposición de la siguiente generación. Independientemente de la tasa de actividad, la tasa de fertilidad sigue cayendo.

Hospital Materno Infantil Teresa Herrera (La Coruña)
Es más, en esta crisis, la diferencia entre las tasas de actividad de mujeres y hombres está aumentando. Sin ponerse a tener hijos como locas, las mujeres jóvenes están o bien en el paro, o bien estudiando. Esto da una nueva dimensión a esa frase que me gusta tanto: "todo lo que puede salir mal, está saliendo mal".

Tasa de actividade de 16 a 24 anos
DataTotalHomes    Mulleres
2010/I 96,7 52,3 44,4
2011/I 87,4 50,0 37,4
2012/I 84,5 45,1 39,4

IGE-INE. Enquisa de poboación activa (27-04-2012)

Es muy curioso comparar estos datos de Galicia con los del País Vasco o los totales de España. Es una pena no disponer de los datos por provincias, ya que comparando el resto de variables demográficas, la conclusión obvia es que las medias gallegas engañan mucho: la Galicia occidental y la oriental apenas tienen nada que ver. (Hace poco salió un informe Ardán que incidía en la esencia de esto: Coruña y Ponteverda aportan más del 80% de la riqueza galaica, bueno, no de la riqueza, pero si leéis el informe entenderéis lo que digo).

Población y riqueza

Un niño de siete años que lea todo esto se preguntará: ¿mayor población garantiza mayor riqueza? La respuesta rápida es "no". Sin embargo, una gran proporción de población entre los 25 y los 67 años trabajando, sí podemos decir que está relacionada con una mayor prosperidad futura. Hay expertos que afirman que que haya un remplazo generacional constante, asegura la introducción de nuevas tecnologías en los procesos productivos (claro que para esto necesitas tener una base educativa, suponemos que eso ya lo tenemos, no somos Uganda). Sin embargo, una pirámide poblacional "sana" no asegura de ningún modo que la masa de gente con mayor capacidad de trabajo, tenga efectivamente un trabajo y estén produciendo. E incluso a ese profesor de informática amante de las afirmaciones gratuitas que me está leyendo, le podría decir que no sólo el trabajo hace una aportación a la riqueza, sino también el trabajo pasado, una vez convertido en ahorro, e invertido con la sabiduría del campesino temeroso de Dios. Introducir el concepto de rentista cuando se habla de mujeres jóvenes que ni trabajan ni tienen hijos, suena raro, pero qué le vamos a hacer. La capacidad de ahorro total de una población con menor querencia por el gasto (¿los mayores gastan menos?) forma parte de cualquier consideración sobre el cómputo de riqueza. Los ahorros del paisano que muere en las vías del tren, no desaparecen con su muerte, téngase en cuenta.

Abundando en las consecuencias dramáticas de vivir largas vidas sin hijos, está el tema de los gastos sociales. Ante cualquier proyección más o menos ingeniosa de la evolución de la población gallega en la próxima década, se puede afirmar con rotundidad que el actual sistema de seguridad social está quebrado, luego necesitará aportes de otras partidas de gasto. Estaría bien conocer si lo que nos vamos a ahorrar en guarderías y ayudas a la vivienda, podría compensar el incremental coste sanitario y de pensiones de los mayores. No he sido capaz de encontrar datos sobre esto (supongo que esos estudios están cogiendo polvo en algún cajón). Muy a cuenta de esto está el tipo de gasto que se está haciendo: no se invierte lo mismo en cuidados médicos hoy que hace diez años. Una mayor intensidad en el uso de recursos por persona, dispara el gasto. Políticamente es muy difícil de llevar a cabo un ahorro en este sentido, pero este debate acabará saltando en los próximos años.

Sigamos pintando este dantesco panorama. Se suponía que la incorporación de la mujer al trabajo iba a ser un balón de oxígeno para el sistema de pensiones. A grandes rasgos, la primera generación de mujeres plenamente incorporadas al mercado de trabajo se está jubilando. Estas mujeres vivirán en su mayoría hasta bien pasados los ochenta años. Teniendo en cuenta que las pensiones actuales las pagan las cotizaciones actuales y que se retrasa la incorporación al mercado de trabajo, sólo postergar la edad de jubilación puede ser realmente y a corto plazo un seguro para el pago de las pensiones. Lamentablemente, retrasar la edad de jubilación parece tener un "efecto barrera" para los más jóvenes que quieren trabajar. En Francia, Hollande se agarra con pasión al truquito de darle la vuelta a la tortilla: jubilación a los 60 años. Se supone que esto empujará a los menores de treinta a incorporarse al mercado de trabajo. No puedo hacer predicciones sobre lo que pasará en Francia, pero aplicando ese truco a esa residencia de ancianos llamada Galicia, el problema sería que no hay trabajo para los más jóvenes. E incluso habiendo trabajo, nada hace pensar que se dedicaran a reposicionar una nueva generación, luego sería imprescindible abrir las puertas a cantidades ingentes de inmigrantes (con lo que eso significa para otro tipo de gastos y externalidades).

Un grupo de niñas reza en un orfanato de Lippe (Alemania), en 1946. Fuente.
Incluso aunque de pronto hubiera una fiebre emprendedora en Galicia, con creación de nuevas empresas productivas y competitivas que bajaran al mínimo el paro en todas las franjas de edad, esto no nos garantiza la reposición de la siguiente generación. Ese escenario idílico necesitaría gente dispuesta a tener hijos, básicamente inmigrantes. Pero si estos inmigrantes no arraigan, ante un ciclo de contracción económica, volarían del nido, con lo que volveríamos a repetir la situación de partida.

Una conclusión rápida de todo esto, la planteo en forma de pregunta: ¿cómo hacer que la gente tenga más hijos aunque no tengan trabajo (sabiendo que tener trabajo no hace que la gente se ponga a tener hijos)?

Consultar:
  • Fernández Leiceaga, Xoaquín. Los escenarios demográficos de Galicia y sus implicaciones económicas. Revista Galega de Economía, vol. 9, núm. 1 (2000), pp 1-21.
  • La pesadilla demográfica gallega
Si en Europa compartimos problemas, puede que tengamos que compartir soluciones

viernes, 15 de junio de 2012

El discurso de la izquierda sobre la crisis

El camarada Enrique Santiago Romero, publicó en Nuestra Bandera -una revista del PCE-, un panfletillo llamado «El fin de un régimen y el imprescindible nuevo proceso constituyente» (Nuestra Bandera núm. 231, Vol V), que sigue la tónica de los extremistas que amenazan el orden constitucional para implantar un nuevo orden todavía más oscuro, terrible y pernicioso.

Casi fijo que sí.
El texto es bastante canónico al identificar las causas y los culpables de que todo vaya mal, según el pensamiento de izquierda. Este tipo viene a decir que la crisis es provocada por una élite en el poder económico para poder machacar a los pepitos. Como si no tuvieran otra cosa que hacer. Como si los tipos de interés marcados por una agencia de planificación central como el BCE o la Reserva Federal, no hubieran incentivado a los agentes económicos para endeudarse a corto plazo para sostener inversiones a largo plazo o de alto riesgo. Dice el tovarich que el plan de la élite -recordad la matraca de la lucha de clases- era provocar la crisis a sabiendas para deshacer el estado del bienestar y así poder... así poder... tener más dinero, supongo. Esta parte no la deja clara. Como tampoco deja claro que en la crisis, la élite financiera acudió corriendo al estado para pedir un abrazo. Es decir, esta crisis pagafantas, es una crisis que se aprovecha para aumentar el poder del Estado. En España, concretamente, fue el sector bancario público el que generó los grandes problemas que hoy tenemos. Los grandes bancos privados, que sepamos, son los que están más cubiertos.

Socialismo del siglo XXI: usar las divisas del petróleo para comprar armas a Rusia.
El camarada del PCE cree que para resolver la situación es necesario dar un puñetazo en la mesa, agarrar por los huevos a los ricos y los banqueros y hacer un golpe de Estado como Lenin manda, ya que el actual ordenamiento constitucional se le queda pequeño. Fíjense aquí cómo tras el plan de rescate americano, los Estados Unidos, poco sospechosos de ser un país izquierdista, empezaron a llamar a brokers, banqueros, directivos, funcionarios y hasta al chico de los cafés a interminables vistas en comisiones de investigación en la Cámara y el Senado. Es decir, pusieron un montón de dinero público y controlaron lo que se hacía con ese dinero, no sin antes preguntar a todo el mundo qué demonios estuvieron haciendo. Pues bien, sin cambiar una coma de ninguna ley, esto también es posible hacerlo en España.

El comunismo ya no es lo que era.
También el ostrogodo reparte un poquito a la Unión Europea, cosa interesante. Lástima que la acuse de ser parte del problema porque fomenta la libre competencia. Desde mi punto de vista la UE es parte del problema precisamente porque no fomenta la libre competencia. En el momento en que obligas al sector lácteo a tirar por la alcantarilla millones de litros de leche para controlar su precio y obligarnos a comprar excedente francés u holandés, ya no estás en un mercado de libre competencia, sino en uno excesivamente regulado. No hay cosa peor que el control de precios: siempre en la historia el control de precios ha supuesto sobreproducción o escasez, afectando negativamente al consumidor final. La mitad del presupuesto europeo se dedica a la PAC, ¡la mitad! cuando supone entre un 2 y un 4% del peso en el PIB de los países miembros (hablo de memoria, pero no debe andar muy lejos). Los intervencionistas han pensado que nuestro sector primario está poblado por idiotas que no saben competir, los han sobreprotegido condenando al cierre a un montón de explotaciones, y condenando al resto a vivir en la servidumbre de la subvención y, al mismo tiempo, expulsando de nuestro mercado parte de la producción de otros países cuyo peso del sector primario es muy superior, ahondando en las causas del mantenimiento de su pobreza. Pero aquí la izquierda no hace crítica. Con un par de cócteles ofrecidos en galas de apertura de una nueva ONG supercomprometida y los posados en los photocall -o como se llamen- de presentadores famosos de la tele, la cosa está resuelta. Genios.

Socialismo del siglo XXI: repartir estopa entre agricultores cocaleros.
Luego, en una nueva visión del Derecho Constitucional, viene a decir que la Constitución tiene que adaptarse a cada momento a las necesidades de la gente. Que no deja de ser una simple ley más que debe ser reformada en cada momento para cumplir con exigencias inmediatas. Que como el referendum fue aprobado en el 78, ya no vale. Aquí, lo del plebiscito cotidiano parece que no entra. Es decir, la participación mayoritaria de la gente en procesos electorales no le vale a este tovarich como síntoma de aprobación de la constitución por una mayoría no despreciable de ciudadanos. Dicho esto, reconozco que un poquito de razón no le falta: la bajísima participación en los referendums de algunos estatutos de autonomía sí que pueden reflejar cierto desapego a esa norma. Sin embargo, una mayor participación en procesos posteriores y el apoyo masivo a partidos que no quieren un cambio del sistema, vendría a contradecir esta tesis. En este aspecto no dice nada del conchabeo de medios de comunicación -corrientes de transmisión de la propaganda de los partidos-, instituciones, sindicatos y logias varias. Y no dice nada, porque lo que le encanta a la izquierda es que exista este conchabeo: le encanta que haya una banca pública, unos medios de comunicación públicos y unos cagaderos públicos. El poder es como la heroína: fácil de engancharte y muy difícil de dejar.

El resto del panfleto es meterse con el Rey y hacer propaganda de Izquierda Unida, cuestiones que carecen de interés.

Una reflexión sobre la marcha antes de ir a merendar: quienes alertan de que la crisis puede traer un aumento de las posiciones extremas antidemocráticas (aumenta la masa de gente desesperada sobre una población deficientemente formada),  parecen no darse cuenta que, en España, ese extremismo surge por la izquierda. Y ya lo tenemos en los parlamentos. Personalmente pienso que IU no es el mayor problema que tenemos metido en el parlamento, sino la gente que le rasca la espalda a una organización terrorista. Ésa sí es una amenaza gravísima a las libertades de todos. Pero de esto nos quejamos cuatro.



Por si alguno piensa que exagero:

jueves, 14 de junio de 2012

Hacia una mayor integración europea por la puerta de atrás

Casi todos dan ya por sentado que la solución a medio plazo de los grandes males que afectan a nuestra economía, se ubica en una mayor integración europea. Tener una moneda común con un banco central que tan solo fija un objetivo de inflación, después de diez años, parece que no es suficiente. Todas las preclaras mentes de la eurocosa no podían ni imaginarse que hubiera una crisis como esta. A nivel europeo, una crisis pagafantas, que, por ósmosis de pánico, dirige el capital hacia una posición central dejando la periferia en pelota picada.


Bien, nos lo hemos ganado a pulso. Iremos pues hacia esa unión fiscal que inexorablemente vendrá acompañada de una mayor unión política. Por el camino van surgiendo ideas chanantes como el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera, el Mecanismo Europeo de Estabilidad Financiera y lo que parece que es la primera piedra en esa mayor unión económica que es el Mecanismo Europeo de Estabilidad. Sal a la calle y pregunta a la gente qué diablos son todas esas cosas. Obtendrás una respuesta similar a si les preguntas por las diferencias entre el Tratado por el que se establece una Constitución para Europa y el Tratado de Lisboa. O por la diferencia en la asignación de escaños del Tratado de Lisboa y el Tratado de Niza.

Viendo toda la historia de esta Unión Europea, carezco de motivos para pensar que la mayor integración económica no se hará de espaldas al común. No entro en la valoración económica de la mayor integración, doctores tiene la Iglesia. Tan solo señalo, alarmado, el proceso de hechos consumados que tenemos que tragar.

No me vale, pues, la excusa de cambiar las cosas a mejor. Probablemente esto sea positivo a medio y largo plazo: nuestra clase política parece inepta y no cuenta con apoyo popular (aun contando con ese apoyo, los políticos parecen no estar dispuestos a aprovecharlo, lo que es lo mismo) y además, reformas gordas, sobre todo en cuanto a la proliferación de empresas públicas de dudosos fines y la estructura del Estado, no parecen que vayan a ser realizadas por nuestros patricios.

La mayor unión económica y la futura unión política, se sostendrán sobre cimientos débiles si todo lo que hacen los padres de la patria es apelar a una idea mítica de Europa. Europa hay que explicarla. La soberanía nacional no se puede vender gratis pues no reposa en los lomos de los leones del Congreso, sino sobre las espaldas de los ciudadanos.

¿Qué esfuerzos se hacen por explicar Europa? A día de hoy, pocos. No quiero ser aguafiestas, pero mientras se suceden cumbres y reuniones de "alto nivel" para arreglar la situación, a los pepitos que compran el pan y llevan el coche al taller, todo esto les es ajeno. ¿Serán conscientes los eurófilos del monstruo que están creando?

Una encuesta sobre el conocimiento y percepción de la Unión Europea y sus instituciones (pdf), realizada en 2010 por el Observatorio Socioeconómico de Segovia, calca bastante bien la percepción que personalmente tengo sobre la consideración popular de la UE: la gente piensa que la UE es beneficiosa, pero no sabe cómo funciona (y en alto grado, tampoco les interesa). ¿No se suponía que uno de los pilares de la UE era la democracia? Pues parece que no. Parece que esta Unión Europea se la supone más tecnocrática que otra cosa. Los políticos tampoco tendrán incentivos para democratizar las instituciones. Ergo no parece que nos vayamos a contentar con acabar con la soberanía nacional, sino que, de paso, nos cargaremos la democracia mítica a la que se supone que aspiramos.

A mi me parece un precio demasiado alto.

miércoles, 13 de junio de 2012

Llevan a la Fiscalía la malversación de la Diputación de Lugo

No está mal, parece que algo funciona en este país arrasado. Xosé Manuel Barreiro, presidente del PP lucense, se chiva a la Fiscalía de la campaña del BNG que patrocina la Diputación de Lugo.

Según Europa Press:
Barreiro, que ha comparecido acompañado de parte del grupo provincial, interpreta que la publicación este martes en tres diarios de una página de publicidad contra el rescate de la banca puede constituir un delito de malversación tipificado en el artículo 433 del Código Penal y que consiste en "dedicar a usos ajenos a la función pública los caudales pertenecientes a la citada función".

Barreiro ha recordado que el BNG desarrolla "una campaña" contra el rescate bancario con el mismo lema de "rescatan la banca, roban al pueblo". "Nosotros entendemos que hay un supuesto delito de malversación de fondos y pedimos que la Fiscalía investigue esta circunstancia", ha señalado.

Pese a que la campaña la suscribe la vicepresidencia, que gestiona el BNG, el portavoz del PP ha depositado la responsabilidad sobre el presidente, el socialista José Ramón Gómez Besteiro. "Como quien anuncia es la Diputación, la Diputación sólo tiene un responsable, que es el presidente. Besteiro tiene que responder por eso. Aquí hay una presunta ilegalidad cometida por el presidente de la Diputación", ha argumentado.
Siempre es una buena noticia comprobar que existe una reacción ante un atropello. Claro que ahora es el momento en que los más avispados hacen la lectura política y se quejan de que el PP también es denunciable en muchísimos casos. Aquí no entro, tan solo apoyaré que se denuncie todo lo denunciable y que los tribunales actúen libremente.

Insistamos en que estas noticias son las que necesitamos. Ahora que el sistema pasa por sus horas más bajas y todo el mundo nos mira como a una república bananera, es necesario dar imagen de competencia y de solvencia institucional. Así, espero que no ocurra lo mismo que ocurrió con el precedente que menciona Barreiro: el tal Juan Hormaechea fue condenado y posteriormente indultado. No estamos para fallos en falso e indultos políticos, ahora es tiempo de justicia y penas largas y dolorosas.

martes, 12 de junio de 2012

La vicepresidencia de la diputación de Lugo hace propaganda del BNG

Que el BNG utilice la administración y los recursos de la administración como una mafia, no es noticia para nadie. Ya sufrimos los gallegos al BNG en la Xunta, desde la que -con la necesaria colaboración del PSOE-, contrataron miles de páginas en la prensa para hacer campañas de ingeniería social y propaganda de partido sin ningún escrúpulo. Las páginas venían firmadas por la "Vicepresidencia da Xunta", órgano de gobierno que actuaba de forma independiente al gobierno de la Xunta del PSOE. Eso es lo que llamamos bipartito en Galicia.

Pues bien, las costumbres hamponas no desaparecen: el BNG no solo no aprende la lección, sino que desde el poder residual que les queda en la administración pública, siguen en sus trece. Resulta que por algún azar del destino, el BNG detenta la vicepresidencia de la Diputación provincial de Lugo. Desde ahí no se les ocurre mejor cosa que hacer propaganda política de la iniciativa "Rescatan a banca, rouban ó pobo". Iniciativa de su partido, cosa de ellos, exclusivamente de ellos y que solo a ellos compete dar a conocer e impulsar.

Clic para ampliar. Ese anuncio apareció en La Voz de Galicia. El diario lucense El Progreso también fue contratado -en este artículo de El País podéis ver una imagen- con tu dinero para la campaña del BNG.
Esto, que en cualquier país del hemisferio norte llevaría a la justicia a actuar de oficio, sería imposible sin el visto bueno del PSOE. La Diputación cuenta con 25 diputados, de los cuales 11 son del PSOE, 2 del BNG y 12 del PP. El BNG tiene la vicepresidencia (cuenta con página web propia, en un claro homenaje al despilfarro), pese a contar con tan solo dos diputados. El PSOE dijo «sí a todo» con tal de poder enchufar a sus miles de cuñados en este órgano de generación de infinitas mariscadas. Con esto, lo que quiero decir, es que el BNG actúa de forma parasitaria malversando fondos públicos, pero el PSOE es tan culpable como ellos.

Y aguantamos cómo hacen pucheritos y llaman al rescate "gran estafa". ¿Y qué hay de vuestra estafa, ladrones? ¿De esa estafa no habláis? Vaffanculo.

Siento vergüenza y repugnancia a partes iguales. Creo que la justicia debe actuar en este caso. Creo que los responsables políticos deben responder con sus bienes personales para reponer el coste de esta propaganda y creo que jamás deben volver a la actividad pública. Espera, no acabé: quiero que dediquen el resto de sus vidas a pasarse casa por casa pidiendo perdón a todos los ciudadanos y que ofrezcan sus mejillas para recibir guantazos. Parásitos.



Relacionado:


lunes, 11 de junio de 2012

Controlar a la clase política

En el clásico instantáneo del señor Garicano, se habla de deberes pendientes. Existe la extendida idea de que quedan muchas cosas por hacer y otras que el gobierno ya dijo que no se iban a hacer, pero puede que tenga que replantearse.

Uno de los millones de elefantes en la sala que tiene este país, es el de los incentivos de la clase política y su relación con el modelo territorial. El Título VIII sirvió para salir del paso (como nuestras leyes laborales, electorales y demás) en un momento dado. Ya no estamos en ese momento. Estamos en una situación económica un poquito complicada y en una situación política crítica (se puede ver esto en el CIS, en los barómetros de algunas regiones y en sondeos privados para alguna prensa oficial). La bosta ha golpeado el ventilador y todo está manga por hombro. ¿Qué mejor momento que este para debatir sobre el ruido de fondo de nuestro sistema?

Si hay algo de lo que se queja todo el mundo es de la sobredimensionada clase política. Todos conocemos ejemplos inmediatos de proliferación vírica de cargos de libre designación, gastos suntuarios, pompa y boato para políticos semianalfabetos con problemas de autoestima, etc. Parte de nuestra felicidad la enterramos en un montón de paletadas modernas -polideportivos, centros de interpretación, infraestructuras infrautilizadas, monumentos horrorosos, festivales esquizofrénicos, museos absurdos, hiperresidencias vacías- impulsadas por auténticos gañanes que se dedicaron a besar calvas de constructores y promotores ventajistas y parasitarios. Todo esto fue posible por la confluencia de múltiples razones. Sin embargo, el ambiente legal en el que se dieron lugar estos atracos, se puede cambiar. Aunque el resto de condiciones se repitan en el futuro -tipos bajos, expectativa de aumento de valor del suelo, sondeos ajustados, etc.-, si las barreras jurídicas se construyen, no se podrá repetir algo así en el futuro.

Viejo ayuntamiento de Cirueña (La Rioja)

Nuevo ayuntamiento de Cirueña. Menudo gol.
Algo ya se hace en este sentido. Me refiero a los límites de gasto de la Ley de Estabilidad Presupuestaria. Pero creo que se puede mejorar más la cosa. La actual situación nos demuestra la importancia de la confianza. Bien, no escatimemos esfuerzos en dar más confianza.

Desinflemos ese gran elefante en la sala que es el hecho de que las administraciones encargadas de las partidas de mayor gasto no se responsabilicen de recaudar el mayor ingreso. Abramos ese melón mientras nos dejen. (Aquí el señor Girauta pasa de puntillas por el tema).

Por una parte están quienes defienden la recuperación por parte del Estado de las grandes partidas de gasto. Por otra, quienes defienden que aumente la capacidad financiera de las regiones. Entre el blanco y el negro hay muchos grises. Hablemos de ello y comparemos de alguna forma qué modelo es el óptimo.

Si las administraciones encargadas del gasto, no se encargan a su vez de recaudar una proporción equivalente de ingresos, continuaremos con la desigual marcha de los incentivos de la clase política. En el momento en que una administración fuera responsable ante los ciudadanos de elegir entre ampliar un ambulatorio o hacer un festival de cine, ante un presupuesto cerrado, creo que las cosas irían a mejor. La gente sería más consciente de que las cosas no son gratis. Además, existiría la posibilidad de cierta competencia fiscal que haría tender a la baja los impuestos.

Antiguo ayuntamiento de Aspariegos (Zamora)


Nuevo ayuntamiento de Aspariegos. Tiene un 100% más de modernidad.

Y ojo, no dejemos de lado en el debate a la administración local. Los ayuntamientos son la primera ventanilla que saluda al peatón. Algunos manejan más presupuesto que varias comunidades autónomas, otros, carecen de ingresos. Parte del meollo está aquí y esto no toca sólo al control de los dineros, sino a la misma calidad del sistema, a la participación ciudadana y a los mecanismos de creación de riqueza. El de los ayuntamientos es un melón gordo que hay que abrir. Por muy poco que guste en aldeas con complejo de galos, hay que enfrentarse a la realidad de que la mayoría de los ayuntamientos deben de dejar de existir. Y aquellos ayuntamientos que han crecido a expensas de ciudades limítrofes, deben articular sus políticas en coordinación con esas ciudades. Esto es algo inmediato, pero que también encuentra mucha resistencia. Sería ideal que los partidos dejaran de actuar como agencias de colocación y pensaran en esto de arriba a abajo. Supongo que para ello haría falta que también los ciudadanos dejáramos de comportarnos colectivamente como siervos y pidiéramos cuenta a nuestros gobernantes. Ah, pero reconocer que en un sistema no feudal, el ciudadano también tiene que hacer su parte, es un salto cualitativo muy difícil de llevar a cabo.

Infinitas ganas de llorar:


Corpo e alma, tanto ten, todo é graxa e manteiga. Don Celidonio é igual por dentro ca por fóra: carne e espírito son a mesma zorza, misturada e revolta, co mesmo adubo de ourego e pemento.

Cuerpo y alma, da igual, todo es grasa y manteca. Don Celidonio es igual por dentro que por fuera: carne y espíritu son la misma zorza, mezclada y revuelta, con el mismo adobo de orégano y pimienta.

O porco de pé, Vicente Risco

domingo, 10 de junio de 2012

Rescate o secuestro

España ha pedido auxilio a Europa y Europa nos prestará dinero a cierto tipo de interés para que podamos sanear el sistema financiero. Curiosa forma de afrontar los deberes: pedir prestado para poder hacer frente a anteriores préstamos y que a su vez los bancos sean capaces de conceder más préstamos a familias y empresas que arrastran una enorme deuda por préstamos anteriores. El juego de palabras es gracioso hasta que te das cuenta que todo ese dinero habrá que devolverlo.


Agridulce sabor de boca deja la constatación del gran fracaso colectivo de España. Agrio porque las decisiones se toman de espaldas a la gente pero tienen graves consecuencias para la gente. Dulce, porque ya no estaremos mareando la perdiz buscando fórmulas para sanear nuestra banca idiota.

Hay muchas dudas en el aire: ¿cuánto será el monto total del rescate? Se habla de 100.000 millones de euros para empezar, pero desconocemos todavía el tamaño del agujero. ¿Qué bancos recibirán la pasta? Hay bancos radiactivos como Bankia y otros en una aparente mejor situación como BBVA, ¿cuánto se asignará a cada uno? ¿qué criterios se seguirán? Se dice que el rescate bancario viene sin contrapartidas políticas. Bueno, desde que Zapatero se suicidó en directo en el Congreso de los Diputados, existen esas contrapartidas políticas. Como poco podríamos pedir que dejaran de tratarnos como a imbéciles.

Que nadie se equivoque: este rescate viene con contrapartidas políticas. Habrá una mayor cesión de soberanía y no nos podemos quejar: se supone que Europa nos está salvando el culo. Tampoco nos podemos quejar porque colectivamente hemos fracasado. Nos ganamos a pulso llegar a esta situación terminal. Temo que no hayamos aprendido la lección. En Europa temen lo mismo.


Por esto último, me hace mucha gracia (bueno, no, realmente me parece lamentable) que la gente se queje echando la culpa a unos y a otros. Fallar a este nivel me parece errado: ni echar culpas no romperá el préstamo que acabamos de firmar. Confieso que yo también quiero en el fondo que pase algo y reconozco que toda la clase política está con razón en entredicho, pero soy realista: las cosas no van a cambiar. El sistema está blindado. Esto es lo que hay, con esto que tenemos delante debemos bregar.


Mirábamos con preocupación a Grecia, Portugal... pues ya estamos ahí. Nos han movido a la clase de los tontos. En nosotros está demostrarles que se equivocan. Hay muchas cosas muy buenas en nuestras empresas y trabajadores. Hay cosas muy interesantes en otros países que podemos importar: modelos de administración pública, esquemas de organización empresarial... Abramos un poco las ventanas que huele a cuco. Despojémonos de la zafiedad, avancemos, marquémonos grandes metas. Si demostramos al mundo de lo que somos capaces, nos lo estaremos demostrando a nosotros mismos. Necesitamos ver que las cosas pueden mejorar. Necesitamos convencernos de que somos capaces de superar la infancia política y económica que arrastramos.

Relacionado

jueves, 7 de junio de 2012

Acabar con todos los peajes

Tras el bochorno que supuso la presentación de unas cuentas públicas un tanto frívolas, al gobierno de la CAM no le ha quedado más remedio que dar un golpe de efecto. Golpe de efecto que afectará al bolsillo de mucha gente pero las medidas de ahorro han funcionando en Estonia y no hay razón para pensar que aquí no lo vayan a hacer.

La condesa de Murillo se propone ahorrar 1.000 millones este año con una bajada del 3,3% del sueldo de los funcionarios (del 10% para cargos públicos y de confianza) y la eliminación de las subvenciones a patronal, sindicatos y partidos políticos. Me pregunto si la eliminación de cargos de confianza ya nos daría un ahorro similar sin tocar esos sueldos. No lo sé. También subirá la ITV, el pago de medicamentos, se carga el Defensor del Menor, etc. Chorraditas que van sumando.

Otras medidas son más dudosas: imponer una tasa por la pérdida de la Tarjeta Sanitaria (algo puramente recaudatorio y peligroso: si se empiezan a tasar equivocaciones entramos en una espiral infinita) y el sacar a concurso peajes en autovías.

Esto último es curioso.

Madrid, como centro de una estructura radial nacional discutible, tiene carreteras de circunvalación alrededor y radios que salen hacia sitios pintorescos como Badajoz o Despeñaperros. Hace tiempo se arreglaron y ampliaron las carreteras nacionales para convertirlas en autovías. Estas autovías son casi gratuitas (el túnel de Guadarrama es sangrante) y dan buen servicio a pesar de frecuentes embotellamientos. El caso es que hace poco, cuando éramos ricos (¿os acordáis?), la CAM decidió construir una serie de autopistas de pago paralelas a algunas de estas autovías. Bien, esas autopistas (R5, R3...) son la cosa más infrautilizada que he visto desde la inauguración del la Cidade da Cultura o el cerebro de ZP (esto fue gratis, je).


Y ahora no se les ocurre otra cosa más que poner peajes en las autovías autonómicas (se habla de la M-45, pero es posible que toquen otras). Supongo que la Koplowitz o Florentino están haciendo cuentas en sus cuevas, pero la experiencia en las radiales de pago indica que tal vez no sea buena idea poner peajes en esas autovías. Lo que lograrán será tener más carreteras libres para los vehículos oficiales o los viajes pagados por todos (esos diputados de Amaiur que suben al norte a quemar buses) y al mismo tiempo, mayor congestión en las vías alternativas gratuitas.

Lo de gratuitas es un decir: realmente todas las carreteras sin peaje también están siendo pagadas continuamente.

La idea del ahorro debe basarse en quitar la grasa y aumentar la eficiencia, no en poner trabas al comercio y la comunicación. Implantar peajes en carreteras es como ponerle la zancadilla al transporte. No creo que ayude nada que turistas, comerciales y transportistas se vean obligados a sufrir más embotellamientos mientras paralelamente corren autopistas vacías por culpa de los peajes. Bastante sufren los que dependen de echar kilómetros a la carretera como para encima aguantar un sablazo más.

Reducir diputados

Se queda corta la condesa al proponer reducir a la mitad los parlamentarios regionales. Bien puede reducir el número de parlamentarios al número de grupos políticos y aplicar un voto ponderado. Ah, no, espera, que es necesario tener un número aleatorio de diputados por el gran trabajo que hacen. Algunos incluso trabajan tan bien, que lo hacen mentalmente, como ese comunista vago tan famoso.

Bromas aparte, reducir el número de diputados y bajar el sueldo a los políticos es provechoso, pero deja cierto sabor amargo a populismo barato. La reforma ideal en este sentido, es cambiar las leyes para que las retribuciones de las cámaras queden fijadas por ley orgánica. O, en su caso, sin entrar en las competencias autonómicas, hacer -de alguna forma mágica- más aceptables y transparentes los sistemas de retribuciones y la limitación de cargos de libre designación. Que sea muy difícil enchufar a cuñados, para entendernos. En un país con más de 440.000 políticos hacer algo en este sentido es impostergable.

Nos comen la merienda

martes, 5 de junio de 2012

La antipolítica también es política

La política es necesaria. Lo que ya no es tan necesario es el corporativismo de la política. Hoy tenemos dos noticias: Divar y los ERE. Quienes criticamos a los políticos, lo que hacemos es criticar sus modos gremiales y corporativistas. ¿Pagan justos por pecadores? Puede ser, pero no veo que los justos señalen a los pecadores.

Nadie cree que Concha y Carmen sean las que fabriquen las políticas de empleo. El proceso legislativo tiene un largo recorrido en el que entran muchas personas. No se espera de Carmen y Concha (C&C) que saquen de la chistera soluciones mágicas. Pero sí que se espera que se comporten como personas normales y no se pongan a hablar de lo suyo. Noticia de Última Hora: sí era posible que dos personas en esa situación dieran una respuesta equilibrada a qué se hace y por qué.

Si quienes critican a los críticos también reconocen las malas formas y las boludeces de C&C, realmente esto quiere decir que todos estamos en el mismo saco. Si se dice que el Follonero las sienta muy juntas para que salten los cuchillos (dice Geógrafo «un espectáculo tan buscado como lamentable»). Lo que hay que ver es por qué van a saltar cuchillos. Por qué tenemos que soportar a una ralea incivilizada y gremial. Es eso lo que se critica. No la política.

Se acusa a la masa que protesta contra esta forma mezquina de hacer política, no sin cierta ironía, que ella sí que sabe solucionarlo todo, variando así el objetivo. Sabiamente Churchill dijo aquello que el mejor argumento contra la democracia es tener cinco minutos de conversación con cualquier elector. Añadid a eso el documental «Votad, votad, malditos» o poned la tele a cualquier hora. Evidentemente la masa no es la única herramienta del proceso legislativo, ni nadie pide eso, pero sí cumple una función esencial en un régimen de libertades: la crítica a los políticos y el freno a su acción. Esto no quiere decir que la crítica a los políticos va encaminada a arreglar las cosas con «cirujanos de hierro». Alguno querrá que se encamine en esa dirección, pero no todos.

¿O acaso se pide que no se critique nada y dejemos hacer a los golfos y mangantes? Precisamente los golfos y mangantes son los menos interesados de que a la política se le ponga cara. Pues bien, bienvenido sea el conocimiento del comportamiento de C&C y de todos los demás.

Se teme que la crítica de la masa enfurecida, "acabe con la política". Me extraña que no haya el mismo temor a defender esta política sobre cualquier otra consideración, acabando con la masa enfurecida. Ambos extremos son perniciosos.

Es fácil estar de acuerdo con la necesidad de que más gente participe en el proceso desde dentro. Lamentablemente tal como están las cosas, es muy difícil cambiar la situación desde dentro. Dos partidos (que parece que son los que hay que defender) tienen entorno al 70-80% del apoyo popular (es decir, de la masa enfurecida que hay que mantener lejos de la política). Estos dos son los que pueden cambiar la política en este país, ¿realmente tienen algún tipo de incentivo para hacerlo? ¿Realmente basta con cambiarlos desde dentro? ¿Realmente se puede hacer? ¿Cuántos afiliados de infantería no son acaso más papistas que el Papa? Y sobre todo, busquemos respuesta al elefante en la sala: el apoyo masivo a estos partidos viene de quienes los critican. Hay una parte de críticos situados fuera de su órbita que pueden hacer mucho ruido pero son cuatro y el de la flauta. Paradójicamente quien más dentro está del sistema, más critica futbolísticamente el sistema.

A estas preguntas también podemos añadir el papel de los medios, cómo se financian, y qué incentivos tienen todos los que ayudan a alejar la política de la calle. En este punto estoy bastante de acuerdo con el comentario de Ismael Peña en el Obsevatori de Ciberpolítica:
considero que los medios de comunicación han abdicado en general de su papel de contrapoder, de cuarto poder que fiscaliza a los otros tres. Pero eso no significa que sean tan culpables de la crisis financiera como el que ha especulado con dinero ajeno o quién lo ha permitido regulando con laxitud. Motivos distintos y distintos culpables, pero diagnósticos parecidos: tenemos instituciones que no cumplen (todas o algunas) funciones necesarias para que el engranaje democrático ruede con suavidad.
Por último, para rematar el pastel: muchos describimos paisajes semejantes y queremos cambiarlos a otros en los que más o menos coincidimos. Los métodos son diferentes, desde luego, pero no veo que haya ninguna voluntad de llegar a acuerdos mínimos. Somos muy buenos copiando los vicios de los políticos mezquinos. Evitemos esos vicios.

Gente elegante



La Casa Real no se investiga y vale ya

Lo de investigar las cuentas de la Casa de SM el Rey, aquí hay dos cosas. Primera, los sinvergüenzas que promueven la iniciativa, miembros destacados del cruce de favores, el mercadeo persa de las cuentas públicas y la desastrosa gestión de las cajas de ahorro. Segunda: la respuesta de los capas doradas de Desembarco del Rey -PP, PSOE. CiU-, paladines de la eutaxia del sistema.


Es muy jugoso para quienes se aburren, pedir que se investiguen las cuentas del Rey. Lo ideal es que surgiera de palacio la iniciativa de hacer públicas sus cuentas. Su Majestad podría poner carita perruna -la misma que puso al pedir perdón- y dejar que cuatro técnicos jubilados de Hacienda auditen sus cuentas en sus ratos libres. Pero no. Se ha decidido marcar ahí una línea roja a la tan manida transparencia de la que hace gala el gobierno de Rajoy. Afortunadamente es muy poco dinero y apenas llama la atención. El caso es que por muy poco dinero que sea, limitar la transparencia de las cuentas no veo en qué ayuda a nadie. Es más, lo único que se consigue es dar pie a fábulas conspirativas. No entiendo cómo la Casa de Su Majestad no accede voluntariamente a esta petición. Todos los gastos extraños y sospechosos los podrían financiar con la parte de ingresos privados que tienen, esos que no se han pedido investigar. Por lo tanto, podrían hacer públicas unas cuentas impecables. Y ganar puntos, ahora que todo el mundo odia con fuerza a la Casa Real, no les vendría mal.

La respuesta de la Mesa del Congreso a la petición de los extremistas exaltados, ha sido también de vergüenza ajena. Dice la señora que grita a su chofer que «va en contra de la propia Constitución». Veamos qué dice la Constitución:
El Rey recibe de los Presupuestos del Estado una cantidad global para el sostenimiento de su familia y Casa, y distribuye libremente la misma.
Si en la petición de investigación no se dice nada sobre controlar o alterar el presupuesto de la Casa de SM, no veo en qué sentido se puede decir que va contra la Constitución. Hacer públicos los gastos, no es lo mismo que controlarlos.

Y de todas formas, insistamos que se trata de una cantidad bastante pequeña, como mucho, descubriríamos una inclinación a aficiones raras: discos antiguos de Paloma San Basilio, piezas de moto de coleccionista, huevos de dodo,...

Antes de que se me olvide, un apunte rápido: qué curioso lo de CiU. En su tierra y su televisión, se cagan todo lo que quieren en los Borbones, pero a la hora de la verdad, son los primeros portaestandartes en guardar y proteger a la Casa Real.


Relacionado:

lunes, 4 de junio de 2012

La intervención no será televisada

La idea es que seamos más intervenidos de lo que ya somos. Rajoy quiere mantener las apariencias en su huida hacia adelante, pero la realidad es tozuda y, no sin razón, los acreedores de España quieren asegurarse de cobrar más temprano que tarde.

No será difícil vender la rendición de soberanía al público: nuestros patricios han hecho mal todo. Y lo poco que han hecho bien, ni siquiera lo han sabido explicar. En esta situación, no es de extrañar que muchos pidan a gritos que vengan esos ya famosos funcionarios grises y herejes. Los últimos mamoneos con Bankia han sido la gota que colma el vaso: no hay dinero para compensar la falta de confianza. Esto lo sabe Madrid, lo sabe Bruselas y lo sabe Frankfurt. Es hora pues no ya de apretarnos el cinturón, sino de desempolvar las viejas películas del Antiguo Egipto y practicar la pose encorvada y calamitosa de los descalzos y sufridos esclavos.


Hay cuestiones que resolver que el gobierno de España no está dispuesto a hacer. Reformas de gran impacto electoral. Nuestros cobardes oficiales del reino, pensando quizá en que todavía pueden salvar su honra, pasan la patata caliente a la Oficina Alemana de Gestión de Deuda o a cualquier otra comisión creada ad hoc para la intervención de España. En el PP puede que piensen que si dejan que sean los alemanes quienes se carguen las autonomías o suban la jubilación hasta los 70 años, a ellos no les pasará tanta factura. El caso es que las próximas elecciones, el PP las perdió hace meses (ahí están los resultados de las andaluzas: los votantes del PP dejaron de votar al PP).

Son números. Todo son números, no hay lugar para el pensamiento mágico ni los brindis al sol. Simplemente si sumamos el pago de los intereses de la deuda, las necesidades de financiación del sector bancario, el vencimiento de las deudas autonómicas, el creciente gasto social y el déficit de la balanza por cuenta corriente, nos encontramos con una elefantiásica cantidad de dinero que simple y llanamente, no tenemos. Y no solo no tenemos, sino que además, en las actuales circunstancias, ni siquiera podemos pedir prestado para pagar. Punto.

Lo único que puede negociar el gobierno de Rajoy es la hora a la que servir el desayuno a los funcionarios bávaros. Como cualquier otro español asqueado, reconozco algo positivo en esta derrota: a la troika se la soplarán los gimoteos de Artur Mas, se pasarán por el forro las reivindicaciones de los sindicatos y observarán con curiosidad etnológica las protestas de los iluminados indignados. Además, consolidar una unión fiscal europea, limitará los destrozos que cualquier político subdesarrollado pueda hacer en el futuro. Puede que en este sentido nuestro régimen mejore aminorando las pulsiones caciquiles de la política cazurra de la promesa perpetua. Pero qué quieren que les diga: me hubiera gustado que eso saliera de nosotros, que no vengan sonrosados funcionarios con sus ojos pequeñitos a constatar que hemos sido unos palurdos, que hemos condenado a la esclavitud de la deuda a las siguientes generaciones.


Se consumará la intervención, aprovechemos la residual dignidad que nos queda, para darnos un último gusto de ver desfilar por maratonianas sesiones de comparecencias en una comisión de investigación, a las docenas de pájaros que desde los Consejos de Administración de las cajas y desde el Ejecutivo anterior ayudaron a ponernos en esta situación. Démonos ese placer. No pido que nadie vaya a la cárcel, tan solo quiero asegurarme que cada vez que alguno de esos individuos pida un solomillo en un restaurante, un pinche de cocina le escupa en la guarnición.