Hablé hace unos días de las hipotecas. De forma burda y chispeante, claro, pues doctores tiene la Santa Madre Iglesia. Hoy quiero volver a hablar de ellas. ¿Por qué? Porque quiero.
En primer lugar hay que empezar a llamar a las cosas por su nombre: en lugar de hipoteca, vamos a decir "préstamo hipotecario". Así, subconscientemente, en lugar de pensar en una parte del intestino delgado, pensaremos en que le debemos un dinero a alguien. ¿Tontería? Puede ser, pero eso queda ahí.
Cuando te conceden un préstamo hipotecario pero todavía no has firmado, haz que la entidad se moje. Impide así que cambien los términos o te endiñen en el último momento tarjetas de crédito, seguros de hogar, etc (si no te interesan, claro). Hay una cosa que se llama oferta vinculante. Esto es, la entidad se compromete con los términos acordados antes de la firma.
Teniendo esto claro, averigua cómo funcionan los préstamos de tipo variable, concretamente cómo funcionará tu préstamo. Normalmente, los intereses de amortización estarán con un diferencial sobre el Euribor del 0,1% al 0,7%. Es fundamental pelear por las centésimas. No te puede parecer esto anecdótico. Centésimas de punto porcentual hoy, suponen miles de euros en las próximas décadas.
Valora tu situación: la comisión por amortización total o parcial, ¿realmente te interesa así? Quizás debas darle un par de vueltas si ves que a medio plazo tu condición económica puede mejorar.
Comisión de apertura: niégate a pagarla. O sea, negóciala para eliminarla. Hay bancos cuya comisión de apertura es cero.
Compara varias ofertas: para ello utiliza el TAE. El TAE es un dato porcentual anual, que te viene a decir lo que pagas de más por tu préstamo teniendo en cuenta comisiones, euribor más diferencial y tipo de interés nominal. Ojo, si nuestro préstamo es a interés variable, el dato del TAE sólo servirá para comparar el primer año. Ojo número 2: gastos tales como notaría, tasación, gestorias, impuestos, son gastos previos a la constitución del préstamo, ligados a la compra-venta de la vivienda y por tanto no están incluídos en el TAE.
Simula la situación: hay muchos simuladores de hipotecas en Internet. Esto es una guerra y en la guerra hay que utilizar todas tus armas.
En primer lugar hay que empezar a llamar a las cosas por su nombre: en lugar de hipoteca, vamos a decir "préstamo hipotecario". Así, subconscientemente, en lugar de pensar en una parte del intestino delgado, pensaremos en que le debemos un dinero a alguien. ¿Tontería? Puede ser, pero eso queda ahí.
Cuando te conceden un préstamo hipotecario pero todavía no has firmado, haz que la entidad se moje. Impide así que cambien los términos o te endiñen en el último momento tarjetas de crédito, seguros de hogar, etc (si no te interesan, claro). Hay una cosa que se llama oferta vinculante. Esto es, la entidad se compromete con los términos acordados antes de la firma.
Teniendo esto claro, averigua cómo funcionan los préstamos de tipo variable, concretamente cómo funcionará tu préstamo. Normalmente, los intereses de amortización estarán con un diferencial sobre el Euribor del 0,1% al 0,7%. Es fundamental pelear por las centésimas. No te puede parecer esto anecdótico. Centésimas de punto porcentual hoy, suponen miles de euros en las próximas décadas.
Valora tu situación: la comisión por amortización total o parcial, ¿realmente te interesa así? Quizás debas darle un par de vueltas si ves que a medio plazo tu condición económica puede mejorar.
Comisión de apertura: niégate a pagarla. O sea, negóciala para eliminarla. Hay bancos cuya comisión de apertura es cero.
Compara varias ofertas: para ello utiliza el TAE. El TAE es un dato porcentual anual, que te viene a decir lo que pagas de más por tu préstamo teniendo en cuenta comisiones, euribor más diferencial y tipo de interés nominal. Ojo, si nuestro préstamo es a interés variable, el dato del TAE sólo servirá para comparar el primer año. Ojo número 2: gastos tales como notaría, tasación, gestorias, impuestos, son gastos previos a la constitución del préstamo, ligados a la compra-venta de la vivienda y por tanto no están incluídos en el TAE.
Simula la situación: hay muchos simuladores de hipotecas en Internet. Esto es una guerra y en la guerra hay que utilizar todas tus armas.
- Simulador hipoteca remunerada Barclays
- Hipoteca Joven BBVA (simplemente por lo de "Joven" yo no querría nada con ellos. Por modernos, hala).
Busca por Internet. Es más, infórmate también de la banca online. Prácticamente todas las entidades españolas tienen sucursales online. Lo que pasa es que todavía somos un poco paletos. En Estonia, el 99% de las transacciones se hacen por internet. Estonia ya es e-Estonia.
Vale, después de todo esto, hay una cosa que acabo de descubrir que se llama "hipoteca multidivisa", perdón, "préstamo hipotecario multidivisa".
¿De qué demonios hablo?
De contratar un préstamo en moneda extranjera. No cualquiera, sino una que se deprecie respecto al euro.
Este tipo de hipotecas no se basan en el Euribor+diferencial, sino en el Libor+diferencial. Este interés varía en función de la divisa, pero siempre es mucho más bajo que el Euribor.
A jueves 23 de octubre de 2008, el Euribor está en el 5,06%. El mismo día, el Libor para dólares americanos está en el 3,42%, el Franco Suizo en el 3,25% y el Yen en el 1,27%. Todos estos datos a un año.
El diferencial que te apliquen será superior al típico 0,5 que suman al Euribor. Puede ser del 1% tranquilamente. Peeero, te puede salir a cuenta.
Ejemplo:
Préstamo hipotecario de una vivienda con una tasación del 90%. Pongamos 160.000 euros. Contratamos un préstamo multidivisa en francos suizos. Ahora mismo el cambio está a 1,5, uséase, que estamos contratando un préstamo de 240.000 francos suizos. En función de la cotización euro/franco suizo, lo que te prestan varía. Si el franco cae frente al euro, pongamos, que se pone en 1,65. No devolvemos 160.000 euros, sino 240.000 francos a 1,65, o sea: 145.454 euros. Casi 15.000 euros "han desaparecido". Eso lo cuentas delante de los amigos haciendo merienda-cena y los dejas con el culo torcido.
Claro que el lado oscuro es que te suceda lo contrario, que caiga el euro y la divisa que contrates se revalorice. Entonces en lugar de "desaparecer" dinero, "aparece" y la cara de tonto que se te queda puede ser histórica. (Aún así, teniendo en cuenta que los intereses son más bajos que con el euribor, puede seguir saliéndote a cuenta, para eso es necesario que practiques con los cálculos. Un simio lo puede hacer).
En España no está demasiado de moda esta modalidad porque somos unos paletos. A la gente le da miedo especular con futuros (que es lo que se hace con esta modalidad hipotecaria) y traga con lo de toda la vida, aunque pierda dinero.
Por cierto, recomiendo finanzas.com.
Vale, después de todo esto, hay una cosa que acabo de descubrir que se llama "hipoteca multidivisa", perdón, "préstamo hipotecario multidivisa".
¿De qué demonios hablo?
De contratar un préstamo en moneda extranjera. No cualquiera, sino una que se deprecie respecto al euro.
Este tipo de hipotecas no se basan en el Euribor+diferencial, sino en el Libor+diferencial. Este interés varía en función de la divisa, pero siempre es mucho más bajo que el Euribor.
A jueves 23 de octubre de 2008, el Euribor está en el 5,06%. El mismo día, el Libor para dólares americanos está en el 3,42%, el Franco Suizo en el 3,25% y el Yen en el 1,27%. Todos estos datos a un año.
El diferencial que te apliquen será superior al típico 0,5 que suman al Euribor. Puede ser del 1% tranquilamente. Peeero, te puede salir a cuenta.
Ejemplo:
Préstamo hipotecario de una vivienda con una tasación del 90%. Pongamos 160.000 euros. Contratamos un préstamo multidivisa en francos suizos. Ahora mismo el cambio está a 1,5, uséase, que estamos contratando un préstamo de 240.000 francos suizos. En función de la cotización euro/franco suizo, lo que te prestan varía. Si el franco cae frente al euro, pongamos, que se pone en 1,65. No devolvemos 160.000 euros, sino 240.000 francos a 1,65, o sea: 145.454 euros. Casi 15.000 euros "han desaparecido". Eso lo cuentas delante de los amigos haciendo merienda-cena y los dejas con el culo torcido.
Claro que el lado oscuro es que te suceda lo contrario, que caiga el euro y la divisa que contrates se revalorice. Entonces en lugar de "desaparecer" dinero, "aparece" y la cara de tonto que se te queda puede ser histórica. (Aún así, teniendo en cuenta que los intereses son más bajos que con el euribor, puede seguir saliéndote a cuenta, para eso es necesario que practiques con los cálculos. Un simio lo puede hacer).
En España no está demasiado de moda esta modalidad porque somos unos paletos. A la gente le da miedo especular con futuros (que es lo que se hace con esta modalidad hipotecaria) y traga con lo de toda la vida, aunque pierda dinero.
Por cierto, recomiendo finanzas.com.
Si has llegado hasta aquí, te mereces un premio:
2 comentarios:
No entiendo nada...en matematicas me he quedado en el teorema de Sarrus (eso si, lo aplico a cualqier cosa que se mueva, no solo a matrices de 3x3)
La mejor estrategia para conseguir gratis una hipóteca es juntarte con treinta colegas y/o conocidos e ir juntos al banco diciendo (con tono amenazador y un rolex de imitación en la muñeca) que tenéis pensado retirar vuestros ahorros simultáneamente.
A ver quién se ríe ahora :D
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